Hace años, esa introducción podía hacerse incluso molesta porque llenaba de impaciencia al espectador antes de comenzar la película, aunque quizás sea una de las piezas más importante de ella. En sus orígenes sólo era un texto blanco sobre negro cuya tipografía describía de que género se trataba.
Se cuenta que hasta que el diseñador Saul Bass no inventó los títulos de crédito, el telón no se levantaba hasta que no empezaba la película. Sólo se escuchaba la música de introducción para ambientar a los espectadores, pero que no se molestaban en mostrar la pantalla, porque ¿quién iba a mostrar interés en leer unas letras insulsas con nombres de personas desconocidas?
Saul Bass era diseñador gráfico, creador de logos. Dirigió además algunas películas, pero su trabajo más laureado es el de creador de títulos de crédito. Otros profesionales ya se ocuparon de crear títulos aceptables, pero fue Bass quien lo elevó a obra de arte. Una pequeña pieza de arte dentro de otra.
Bass diseñó créditos que adelantan, insinúan o advierten de lo que se va a ver en el film. Marcó un estilo abstracto, de tipografías propias, con una marca personal y característica. Los primeros fotogramas de una película bastan para saber que los créditos son suyos.
Ha trabajado con varios directores, entre ellos Scorsese en El Cabo del Miedo (1991), Casino (1995), entre otras. Pero su director de cabecera fue Hitchcok. El señor Alfred comenzó en el cine diseñando y dibujando títulos y carteles de dialogos para las películas mudas para los Islington Studios. Quizá por eso le ha prestado tanta atención a este arte. Así que cuando empezó su andadura profesional como director, le encargó esta sección a uno de los mejores: nuestro Bass.
Tal fue la química con Hitchcok que fue él quien diseñó el story board de la escena de la ducha de Psicosis (1960), algo nunca reconocido por Hitchcok, a pesar de su amistad con el diseñador. Una de las mejores creaciones para el director fueron los títulos de Vértigo (1958) con música del compositor Bernard Herrmann que influnde una sensación de hipnotismo al espectador.
Personalmente, considero también a Tim Burton otro genio de los "main titles". Con la típica e inquietante música de Danny Elfman, el director crea para sus películas unos travellings animados, precedidos del logo de la productora, normalmente en un ambiente asfixiante y casi tétrico, con ritmo mecánico, como una fábrica.
Y para no focalizar este arte en estas dos figuras, veamos este vídeo donde se rinde homenaje a algunos de los mejores títulos de crédito de la historia del cine., creado por Art of the Title, donde encontramos una amplia base de datos de estas piezas.
Si os ha interesado el tema, además de esta web os aconsejo el libro Uncredited que hace un amplio recorrido por la historia del los títulos y contiene DVD. Y si queréis hacer vuestros propias creaciones, seguid el esquema del profesor Juan Luis Molina para una perfecta realización.
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Fuente: BunquerBlog
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