Descontextualiza el universo Disney y lo llena de vicios, doble moral, falta de valores, explotación, culto al cuerpo, vanidad, baja autoestima, etc. Además, hace una crítica a la idealización que prestan estas películas que prefieren obviar, por ejemplo, la homosexualidad por considerarlo como algo inmoral o perverso, más incluso que las malvadas madrastras de los cuentos. Ya sabéis...la princesa siempre se enamora un apuesto príncipe.
Resumiendo, ilustra las consecuencias reales de los personajes si hubiesen vivido en nuestro tiempo y en nuestro mundo.
Un trabajo no apto para menores de edad.
Fuente: Hola soy Toño
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